Nada. NADA.
Expulso aire por la boca pa borrar primaveras.
Nado.
Harta, guapa, cansada. Rompo olas con mis brazos.
Y esto es todo, igual a nada. Igual a todo. Igual a harta. Igual a cansada. Igual a cruelmente guapa.
Igual a este mundo desigual, manco, ronco. Raro.
La nada parece leche cortada. Si al menos supiese a tierra valdría la pena. Pero ese blanco mortecino en mis papilas me corta la sonrisa, me lleva al limbo donde ni siquiera vive el animal de la tristeza con veinte cabezas.
Donde solo resuena el eco de una voz que no dice nada. Lenta, blanca, ausente.
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Solo me vives en la palabra escrita.
ResponderEliminarNo te silencies,
No te me mueras.
La nada es el lugar deshabitado por las letras.