Pide, amor, que crezca la noche en tu espalda, que estará seca de sonidos nocturnos, yo la lloveré con mi saliva fraguada en cárceles sin llaves, en ciudades sin muros.
Dame, amor, que de la noche crecida en mi espalda florezca el Sol,mojando de música el día y su silencio azul, me nutriré con la savia que cultivaste en tus huertas y jardines andaluces
Dame, amor, que de la noche crecida en mi espalda
ResponderEliminarflorezca el Sol,mojando de música el día y su silencio azul, me nutriré con la savia que cultivaste en tus huertas y jardines andaluces
Hola, te devuelvo tu oleaje. Abrazo.